3 de septiembre de 2012
Aterrizamos en el aeropuerto internacional de Yakarta a
las 12:30. Como curiosidad, nos encontramos más al este que Malasia, pero aquí
es una hora menos.
El tema del pasaporte de Carol no se ha resuelto, así que
por un lado volamos Susana y yo,
esperando recibir noticias cuanto antes de ella y Hollywood.
Los primeros cambios empiezan al llegar al nuevo país, y
lo primero es familiarizarnos con la moneda. Ya no usamos ringgits, y ahora son
rupias indonesias.
De camino en autobús hasta el centro urbano, observo un
río, está completamente lleno de basura, bolsas de plástico, absolutamente
contaminado.
Pensaba haberlo visto todo en cuanto al tráfico...Yakarta lo supera. |
Nos alojamos cerca de la plaza de la libertad, en el
centro de la ciudad.
Este mismo día ya estamos buscando la manera de salir de
esta megalópolis. Nuestro destino es Yogyakarta. Pero antes de marchar, tengo
tiempo para visitar, el monumento de la libertad, el museo nacional de
Indonesia, y la oficina de correos (Cartón! el party time va a llegar SI o SI).
Un tren nocturno en “primera clase” nos planta en
Yogyakarta. Aquí coincido con Shinta, una chica indonesia, a la cual conocimos
en INDIA. Estamos de suerte, nos deja su moto, nos lleva a comer junto con su
novio Andy y después visitamos el Merapi.
Al fondo el Merapi |
Esto era un bosque antes de la erupción del Merapi en 2010 |
2º pinchazo del día de Andy. |
Problemas en la ascensión al Merapi. |
Un volcán aun activo, y que en el
2010 causó una gran catástrofe. Tommy, amigo de Shinta, nos saca de la ruta
turística, aunque no tenemos suerte, el día está nublado y solo vemos las faldas del volcán. Pero si
observamos lo que este fenómeno de la naturaleza provocó al entrar en erupción
en octubre de 2010.
De vuelta a la ciudad, nos acoplamos al plan de cenar en
una reunión de couchsurfing que junta a más de 30 personas de diferentes
nacionalidades.
La mayor de las casualidades, hace que me encuentre con Steve,
un chico indonesio que conocí en VIETNAM.
Ultimo día en Yogyakarta, ya tenemos pasaje (tras
regatear los precios en diferentes agencias) a Cemoro Lawang, desde donde
subiremos al volcán Gunung Bromo. Pasamos las últimas horas del día con Shinta
y sus amig@s, cenamos juntos en un auténtico local de calle, comida tradicional
indonesia.
"Rie cuando estes triste, llorar es demasiado fácil"